Comunicación.
La exposición
La exposición es la
transmisión de información objetiva y de conocimientos de manera
clara, ordenada y precisa.
Según la intención
del emisor y las características del receptor, podemos distinguir
dos tipos de exposición: la especializada o científica, que se
dirige a un receptor entendido y desarrolla un asunto de gran
complejidad, y la divulgativa, que se dirige a un receptor amplio y
trata temas de interés general.
Los textos
expositivos se articulan en torno a un tema o idea principal, llamada
tesis. En función del método de exponer la tesis y de su
estructura, distinguimos dos tipos:
- Exposición deductiva. Parte de lo general para llegar a lo particular. La idea principal se establece al comienzo del texto y después se argumenta.
- Exposición inductiva. Parte de lo particular para llegar a lo general. Primero se aportan datos que conducen a la idea principal o tesis, que aparece al final como conclusión.
La
Ortografía. Los signos de puntuación
Los signos de puntuación representan
en la escritura la estructura oracional, las pausas y la entonación
de la lengua oral.
Uso de la coma
- Separar una oración circunstancial que precede a la principal.
- Separar los elementos de una enumeración sin conjunciones.
- Aislar expresiones como por ejemplo, es decir, etc.
- Separar el nombre de la persona a la que hablamos.
- Indicar que el verbo ha sido omitido.
Uso del punto y
coma
- Separar elementos de una enumeración que incluye comas.
- Separar oraciones que comienzan por sin embargo, no obstante, etc.
- Unir oraciones que guardan una estrecha relación de contenido.
Uso del punto
El punto es el signo
ortográfico que limita enunciados. Siempre se emplea mayúscula tras
él. Existen tres tipos de punto en función de para qué se emplean:
- Punto y seguido. Separa enunciados que mantienen una relación de contenido entre ellos, por lo que forman un mismo párrafo.
- Punto y aparte. Separa párrafos de un texto que desarrollan contenidos diferentes dentro del mismo tema.
- Punto final. Marca el final de un texto.
Gramática. El
predicado. El predicado nominal
El predicado es la
información que se transmite sobre el sujeto, y expresa la acción
que realiza, padece o experimenta.
El predicado se
estructura en torno a un grupo verbal, cuyo núcleo, el verbo, que
puede llevar complementos. Existen dos clases de predicado según su
tipo de verbo:
- Predicado nominal. Es el constituido por un verbo copulativo o semicopulativo. Los verbos copulativos son: ser, estar y parecer. Estos verbos apenas aportan información, por lo que necesitan un complemento, llamado atributo, que expresa la cualidad atribuida al sujeto: Lidia es amiga mía.
- Predicado verbal. Es el que tiene como núcleo un verbo predicativo, es decir, un verbo que posee significado pleno. Puede aparecer acompañado de complementos: Javier lee un libro en el salón.
El predicado
nominal. Núcleo
El núcleo del predicado nominal es un
verbo copulativo o un verbo semicopulativo.
Los verbos
semicopulativos son verbos predicativos cuando se emplean de forma
copulativa: Ana anda preocupada.
Igualmente puede
ocurrir que un verbo copulativo tenga uso predicativo: El concierto
fue en el gimnasio; El director está en su despacho; Beatriz parece
muy tranquila.
Según la relación que establezca el
verbo entre el sujeto y el predicado, se distinguen dos tipos de
oraciones con predicado nominal:
- Identificativas. Se identifican sujeto y predicado y pueden intercambiar su orden: El doctor Gálvez es el médico.
- Atributivas. Se atribuye una cualidad al sujeto: Marcos es muy divertido.
El predicado
nominal. Atributo
El atributo es un
complemento verbal necesario que nombra una cualidad, propiedad o
estado del sujeto, con el que concuerda en género y número.
La función de atributo puede estar
desempeñada por un grupo nominal, un grupo adjetival, un grupo
preposicional o un grupo adverbial.
Tema 10
Gramática.
Complementos del verbo. El análisis de la oración
Los complementos del
verbo son grupos sintácticos que completan lo expresado por el verbo
o añaden alguna circunstancia. Según la obligatoriedad de que
aparezcan, se clasifican en:
- Argumentos. Son necesarios para completar el significado del verbo.
- Adjuntos. No son necesarios aunque añaden significados relacionados con la acción verbal.
Complemento
directo
El complemento
directo es un argumento que designa el objeto o la persona sobre el
que recae la acción del verbo.
Desempeñan esta función un grupo
nominal, cuyo núcleo puede ser un sustantivo, una palabra
sustantivada o un pronombre personal (me, te, se, lo, la, nos, os,
los, las), o un grupo preposicional, con a si se trata de personas.
Complemento
indirecto
El complemento
indirecto es un argumento que designa el destinatario de la acción
del verbo.
Los grupos que pueden desempeñar esta
función son un grupo preposicional con a o un grupo nominal cuyo
núcleo sea un pronombre (me, te, le, se, nos, os, les).
Complemento de
régimen
El complemento de régimen es un
argumento que precisa el significado del verbo y se construye con una
preposición exigida por este.
La función de complemento de régimen
la puede realizar exclusivamente un grupo preposicional. La
preposición empleada la determina el verbo.
Complemento
agente
El complemento
agente designa quién realiza la acción del verbo en las oraciones
pasivas.
La función de complemento agente la
desempeña siempre un grupo preposicional introducido mediante la
preposición por:
Complemento
circunstancial
El complemento
circunstancial informa de las condiciones en las que se desarrolla la
acción del verbo. Puede indicar las siguientes condiciones: lugar,
tiempo, modo, cantidad, instrumento, compañía, causa y finalidad.
La función de complemento
circunstancial la pueden desempeñar: un grupo nominal, un grupo
preposicional o un grupo adverbial.
Complemento
predicativo
El complemento predicativo complementa
a un verbo predicativo y al sujeto o al complemento directo. La
función de complemento predicativo la pueden desempeñar: un grupo
adjetival, un grupo nominal o un grupo preposicional.
Literatura.
El género teatral o dramático
El texto teatral
carece de narrador y, por tanto, son los propios personajes los que
nos informan de lo que ocurre en la obra. Son obras para ser
interpretadas.
Sus elementos
básicos son el diálogo y las acotaciones¸ que son las indicaciones
del autor para desarrollar la obra. Aparecen entre comillas y en
cursiva en el texto.
Las obras teatrales se estructuran
según su contenido y su forma:
- Estructura interna. Generalmente organiza su argumento en planteamiento, nudo y desenlace.
- Estructura externa. Las obras se dividen en actos o jornadas, que se separan por la caída y subida del telón. A su vez, los actos pueden dividirse en escenas (marcadas por la entrada o salida de personajes) y cuadros (marcados por cambios en el espacio o en el tiempo).